El roquefort es un queso azul francés con un sabor espectacular que además de estar riquísimo solo o con pan, es excelente como base para salsas en innumerables platos, ya sean fríos o calientes. Su mezcla con nata o crema suaviza su sabor, sin perder una esencia que termina cautivando a todos. Te enseñamos a hacerla
INGREDIENTES
- 200 gr. Queso Roquefort
- 2 Huevos
- 400 gr. Nata líquida
- Pimienta molida
PREPARACIÓN
1) Ponemos a fundir el queso en un cazo junto a la nata líquida. Mientras se van deshaciendo batimos los dos huevos en la batidora, agregando posteriormente la nata y el queso fundido. Mezclamos bien los ingredientes, echamos -a gusto- un poco de pimienta molida y reservamos en el frigorífico.
Ten en cuenta que aunque a priori la salsa parezca algo líquida, una vez pasada por el frigorífico toma una consistencia ideal.
Ahora que tenemos la salsa, ¿por qué no te animas a hacer alguna de estas recetas? Te proponemos: Solomillo al roquefort, Cogollos de lechuga y anchoas con roquefort y Flamenquín de jamón york y queso roquefort.
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