Una tarrina de sobrasada y una masa de hojaldre te bastarán para hacer unos rápidos saladitos con los que agasajar a los invitados a una fiesta, un cumpleaños o una comida o cena frías. Son un recurso perfecto, lleno de sencillez y sabor
INGREDIENTES
- Masa de hojaldre fresca (275 gr.)
- Un poco de Harina
- 1 Huevo
- 125 gr. Sobrasada
- Semillas de sésamo
PREPARACIÓN
1) Precalienta el horno a 200ºC y desempaqueta la masa de hojaldre que habremos comprado fresca. Normalmente incluye un papel de horno en su interior que impide que se pegue. La que yo adquirí viene en rollo, así que echas un poco de harina sobre la superficie -lisa- en la que vayas a trabajar, la sacas, desenrollas y le das un par de pasadas con un rodillo de cocina para extenderla uniformemente.
2) Seguidamente bates el huevo y divides la masa verticalmente en dos trozos. Rellena la parte de central de cada trozo con una generosa tira de sobrasada y cierras. Así que doblas y cubres con las partes laterales de la masa. Primero tapamos con una, untamos sobre ella y a lo largo de todo el rollo un poco de huevo batido y cerramos con la otra. Apretando el filo para que selle bien y no se salga al hornearse. Entonces le das la vuelta y cortas en 9 trozos similares. Haz lo mismo con el segundo trozo de masa.
3) Finalmente colocas los 18 saladitos en una bandeja de horno, untas cada pieza con huevo, espolvoreas a tu gusto semillas de sésamo. Lo horneas hasta que veas que sube la masa y se doran. Calcula entre 15 y 20 minutos.
OBSERVACIONES
- Siempre puedes hacer la masa de manera casera pero así es muchísimo más rápido. Además es baratísima, poco más de 1 €. También puedes comprar la masa congelada, la elaboración es similar, sólo que tendrás que sacarla con algo de tiempo del congelador y amasar un poco más.
Si no quieres tantos saladitos iguales, puedes probar a hacer, con la misma masa, Saladitos de jamón york y queso, Saladitos de salchicha, Saladitos de atún o Saladitos de espinacas y queso roquefort.
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